El alcalde Toni Pérez, pregonero de los festejos, rememora la vida y las fiestas del barrio de la Huerta en un sentido homenaje a sus antepasados y a los de decenas de familias de Benidorm
El barrio de la Huerta de Benidorm ha festejado este fin de semana los días grandes de las tradicionales Festes del Roser, la fiesta de ‘los solteros’, con dos jornadas marcadas por las intermitentes precipitaciones que se han sucedido sin tregua en la ciudad y que han obligado a los ‘fadrins’ de 2025 a tirar de planes B; una circunstancia que, no obstante, apenas ha deslucido los actos organizados por la comisión que preside Pere Buigues ni tampoco las ganas de pasarlo bien.
Precisamente debido a la lluvia, el Trinquet Vicente Pérez Devesa albergó ayer uno de los actos centrales de la Festa, la Ofrenda de flores en honor a la Mare de Déu del Roser, inicialmente prevista en la plaza de la Ermita pero que finalmente tuvo que celebrarse bajo techo. La Corporación municipal, encabezada por el alcade Toni Pérez y la edil de Fiestas, Mariló Cebreros; el diputado autonómico José Ramon González de Zárate; el párroco de la Ermita, Efraín Alfonso Zapata; las reinas de las Festes Majors Patronals, Paula Pascual Sánchez y Aitana Pérez Gutiérrez, junto a sus damas de honor; representantes de la Comissió de Festes y de la Associació de Penyes Verge del Sofratge; vecinos de l’Horta; o representantes de las distintas comisiones de fiestas de la Ermita, como la Cabalgata de Reyes, Sant Isidre o Sant Antoni, arroparon a los jóvenes festeros del Roser en este entrañable acto, que estuvo presidido por una imagen de la Virgen del Rosario junto a la imagen de la Virgen del Sufragio, patrona de Benidorm, que había permanecido en la capilla de la plaza de toros y que a partir de ahora, al menos según la voluntad expresada por muchos vecinos, será depositada en la Ermita de Sanç.
El alcalde de Benidorm, Toni Pérez, elegido por la comisión de este año para pregonar la Festa del Roser y vecino del barrio de la Ermita, pronunció un emotivo pregón, en el que rindió homenaje a sus antepasados y a los de decenas de familias de Benidorm, para los que la vida en la Huerta lo fue todo. “De nuestros antepasados, además de este enclave maravilloso de todos, de la casa familiar, un trozo de huerta o una tierra de secano, hemos heredado nuestro patrimonio más valioso”, trasladó el primer edil, para después llamar la atención en la necesidad de mantener viva la llama: “Aquella gente trabajadora, más o menos humilde, pero todos de letra clara, nos han dejado un buen puñado de vivencias, costumbres y consejos y, por encima de todo, una forma de ser y de entender la vida. Los principios y valores que configuran nuestra personalidad e identidad, como personas y como pueblo. Y junto a todo ello, un legado vital que ha pasado de generación en generación y que tenemos la obligación de preservar”.
Toni Pérez recordó cómo en su casa de la Huerta las puertas estuvieron siempre abiertas; los barrancos, caminos y bancales llenos de almendros u oliveras; el cuidado del campo y de los animales, antes a mano y ahora mecanizados; y cómo para los niños de antes y de ahora “ir a la Huerta y pisar el barrio era como visitar un gran parque de aventuras”. “Y no os digo nada de las Fiestas, en aquellos tiempos de cucañas, coetes, partidas de pilota y travesuras diversas”, siempre en compañía de amigos. También elevó a arte los trabajos del riego y llamó la atención en cómo, hasta hace muy poco, la Huerta no se circunscribía al barrio que al que da nombre en la actualidad, sino que además abarcaba los de Foietes, Salt de l’Aigüa, Els Tolls, el Saladar y el Rincón de Loix, porque “somos muchos los benidormenses de hoy, grandes o pequeños, que renacemos de la Huerta de Benidorm”.
Toni Pérez finalizó su pregón invitando a los vecinos y ‘fadrins’ a disfrutar de la Festa y pidiendo su protección a la Mare de Déu del Roser.
Tras el pregón oficial, el presidente de la Festa del Roser, Pere Buigues, también se ha dirigido muy emocionado al público, para agradecer todo el apoyo recibido durante este año para poder sacar adelante las fiestas. Especialmente, por parte de todos los jóvenes que han participado en la Comisión, así como a los padres y madres de todos ellos, reconociendo que “sin ellos, nada de esto habría sido posible”.
Al finalizar este acto, las reinas de las Festes Majors Patronals y muchas de sus damas han dedicado a la Mare de Déu del Roser sus ‘copletes’, tras lo cual han bailado el tradicional Ball del Peuet en el interior del Trinquet. Para finalizar, todos los asistentes se han desplazado en romería hasta la plaza de la Ermita, donde se ha disparado la ‘Estampeta’ y un castillo de fuegos artificiales para poner el broche al acto oficial.
Seguidamente, la fiesta continuó durante la noche con picaeta y música de Dj.
Este, domingo, a las 10.30 horas, se ha oficiado una misa solemne, a cuyo término se ha leído el nombre de las ‘fadrines’ que formarán la comisión de Festes del Roser 2026.
















































































































































































