La pandemia, por segundo año, impide la celebración de las tradicionales fiestas marineras
Con una misa en la Iglesia Parroquial de Sant Jaume y Santa Anna en honor a la Virgen del Carmen, Benidorm ha celebrado la tradicional festividad de la Estrella de los Mares, la Virgen del Carmen, que, por segundo año consecutivo, ha reducido al mínimo la conmemoración por la pandemia provocada por la Covid-19.
A pesar de la suspensión de los actos de tanta raigambre y multitudinarios que año tras año congregan a miles de personas durante estas fiestas en Benidorm, como la Ofrenda a los Caídos o la procesión marinera por el puerto, la Comisión de la Fiesta de la Virgen del Carmen no ha querido dejar de conmemorar la efeméride, como así ha hecho.
El alcalde de Benidorm, Toni Pérez, y el concejal de Fiestas, Jesús Carrobles, junto a una nutrida representación de la corporación municipal, han acompañado en el servicio religioso al presidente de la Fiesta del Carmen, Ginés Alvarado, a su Marinera de Honor, Laura Pascual Llambrich y a todos sus componentes que ya se conjugan para que la festividad del próximo año recupere el brillo y la emoción que la Estrella de los Mares y Benidorm merecen.
El momento más íntimo del acto coincidió con el recitado del poema en valenciano y castellano que Laura Pascual Llambrich dedicó a la patrona del mar que emocionó a los asistentes e hizo brotar las lágrimas de la rapsoda.
